Imprimir

EL VICEPRESIDENTE DE LA LIGA NAVAL, REALIZÓ PARA INFOBAE UNA NOTA QUE MUESTRA UN PARTICULAR ASPECTO DE LA ACTIVIDAD DE LA PREFECTURA NAVAL ARGENTINA


Hace menos de un mes, la Prefectura Naval Argentina cumplió 206 años de vida, al reconocer a Martín Jacobo Thompson -capitán de puertos y comandante de matrículas al ocurrir la Revolución de Mayo- como equivalente a lo que representa hoy la figura del Prefecto Nacional Naval. Esta fuerza federal tiene la responsabilidad primaria de ser la "autoridad marítima nacional" con injerencia en todos los espejos de agua del país, desde el vasto océano Atlántico hasta ríos y lagos. El control del trafico fluvial y marítimo, la habilitación de todo el personal navegante -sea marino profesional o deportivo-, el control de las actividades pesqueras y en forma concurrente con la Armada la protección de la vida humana en el mar y el rescate de personas en peligro. Las mismas se han visto incrementadas en los últimos años a través de la presencia de "prefecturianos" en el corazón de la ciudad y en zonas donde ha sido necesario reforzar la seguridad de la población.



Por su grado de profesionalismo y equipamiento, la Prefectura Naval Argentina es considerada como una de las mejores policías marítimas del mundo e integra la Red Operativa de Cooperación Regional de las Autoridades Marítimas de las Américas (ROCRAM).

Dentro de su campo de acción y su especificidad marítima, hay una actividad de esta fuerza federal que es motivo de orgullo institucional. La Prefectura Naval Argentina cuenta con un plantel de músicos profesionales que integran distintos agrupamientos musicales. Desde la banda de música de la Institución, pasando por la Orquesta sinfónica de la Prefectura Naval, un cuarteto de cuerdas, una agrupación coral, una configuración especializada en música folclórica y hasta clínicas musicales.

¿Ahora, por qué una fuerza policial invierte tantos recursos en hacer música?

La Oficial Principal Carolina Ramundo es la directora de la Banda de la Prefectura. Su condición de "mujer policía" (todos los músicos de la institución tienen estado policial) corre en forma paralela a su estatus de profesora de música. En diálogo con Infobae, explica aspectos desconocidos como que -al margen de las cuestiones meramente protocolares como la musicalización de ceremonias oficiales, la rendición de honores a las autoridades y otras propias de todas las fuerzas de este tipo- la música constituye para la institución una herramienta de interacción con la sociedad a la que deben su razón de ser.

El trabajo social que realiza la PNA en barrios humildes tiene en las configuraciones musicales que se utilizan de acuerdo a cada caso un alto valor estratégico a la hora de tener que ingresar la fuerza policial a cumplir tareas de prevención en terrenos complejos. La música hace que el ciudadano vea antes al artista que al policía. Según Ramundo, el nexo que se establece entre los vecinos y el uniformado se torna más fuerte y se generan vínculos que luego se proyectan hacía el hombre que porta el mismo uniforme pero ya con tareas netamente policiales.

Asimismo, tanto la banda como las demás agrupaciones musicales de la Prefectura Naval, desarrollan otro tipo de tareas sociales en colegios, clubes de barrio o donde se la requiera. Ejecutan los músicos las típicas marchas miliares argentinas, alternadas con música popular, no solo nacional sino también regional o internacional. Entusiasma inevitablemente al público que termina cantando desde una canción de moda hasta marchas tradicionales como "San Lorenzo" o la Marcha de la Malvinas.

Carolina Ramundo es además una de las pocas directoras de banda de Argentina. Tuvo el particular privilegio de ser la única mujer en estar al frente de una banda durante el reciente "Desfile de Bandas del Bicentenario", que tuviera lugar el pasado 10 de julio, a lo largo de la Avenida del Libertador y culminara con un "Carrousell de bandas" en el Campo Argentino de Polo. De esa vivencia, Carolina Ramundo rescata el cariño del público que acompañó las 20 cuadras de marcha y no oculta su emoción al recordar el sublime momento que un millar de músicos de 11 países ejecutaron los acordes del Himno Nacional Argentino.

"Las circunstancias se dieron para que tuviera el honor de ser protagonista de ese gran día", afirma. A medida que el diálogo avanza, el salón de ensayos ubicado en dependencias de la Prefectura de zona Rio de la Plata comienza a poblarse de músicos de distintas edades. Desde jóvenes marineros a veteranos ayudantes mayores, con más de 35 años de servicio en la fuerza.

La pregunta es obvia. Ramundo dirige un grupo humano de más de cien efectivos, en su mayoría de sexo masculino y con muchos años de experiencia.
¿Es esto una traba a la hora de realizar la tarea?
Es un trabajo en equipo nunca somos menos de 20 músicos en acción, cada uno conoce a la perfección su tarea y tengo todo el apoyo tanto de mis músicos como de mis superiores".

Resulta increíble que el estruendo de decenas de instrumentos que cada uno de los músicos comienzan a afinar, se transforme en un momento en los marciales acordes de la Marcha de la Institución o en un clásico de la música internacional. Pero Carolina y su "banda" están empeñados en demostrarnos que es posible.

Para ver los videos haga click aquí
Nota publicada en Infobae