Según informa la prestigiosa Revista Puerto, la justicia dispuso acotar severamente la duración y facultades de la multifuncionaria Gladys González quien contrariando el principio que indica que un legislador no puede tener trabajos a órdenes de otro poder del estado, detenta de forma inexplicable la doble condición de diputada oficialista e interventora judicial.
Según fuentes Judiciales, la labor de la nombrada como aporte a la justicia “fue mucho más pobre de lo esperado”; tuvo un efecto más mediático que efectivo, ya que lo que supuestamente descubrió era lo que ya se sabía.
Así las cosas, el juez Canicoba Corral en cumplimiento de lo dispuesto por su alzada, apartó de cuajo a la blonda legisladora de la tarea de normalización del gremio, por la poca confianza que tanto los aliados de Omar Suárez como los opositores tienen en la misma.
Un duro revés para la mujer que quiso usar al sindicato como trampolín para su Carrera al Senado de la Nación, según los corrillos del poder, en Cambiemos han tomado debida nota que no todo lo brilla como los cabellos dorados… Finalmente está muy lejos de ser oro.