Desde 1984 en adelante, el nombramiento de los directores de la Escuela Nacional de Náutica fue un tema cada vez más complejo y polémico que ha producido grandes conflictos entre distintos actores del sector. La gestión en la dirección de la Escuela tampoco escapa a múltiples conflictos como, por otra parte, suele ocurrir con el rectorado de toda casa de altos estudios pública. Lo paradójico es que quienes han ocupado el cargo son personas de bien que cuentan con el aprecio y reconocimiento de la mayoría de sus colegas.
Según esta página informativa de la Liga Naval, hay quienes consideran que, dado el cambio de gobierno nacional habría que propiciar el cambio de director en la Escuela de Náutica. Es una opinión algo aventurada, en primer lugar porque pone el tema en el terreno de lo político partidario, en segundo lugar porque de no haber un claro consenso previo en el camino a recorrer, el riesgo de repetir enfrentamientos y acusaciones del peor nivel está completamente vigente, más aún, se podría afirmar que en cada designación la polémica ha ido siendo cada vez peor. En todo caso hay tres actores que son de consulta insoslayable: la Armada Argentina, en cuya órbita la Escuela funciona, y los dos centros profesionales que representan sindicalmente a los graduados de Cubierta y Máquinas. Para el resto cabe la máxima periodística de que la opinión es libre.
Hernán Pablo Gávito
RADIOOPERADOR NAVAL GENERAL (ESNN)
OFICIAL FLUVIAL DE PRIMERA
PERIODISTA
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