"Es la caja, estúpido" podría resultar la conclusión de la nota de Fernando Morales. Desde que el sueño de Vicentín se cayó, hay algunos funcionarios que se preguntan como resolver el problema que, obviamente, siempre será en nombre de la Patria y con el nacionalismo como bandera. El problema es que se nota demasiado que todo va improvisado y que del tema Fernanda Vallejos sabe menos que Claudio Lozano de Vicentín.

"El Río Paraná es la principal autopista navegable de la Argentina y una de las más importantes del mundo. Por esta ruta se transporta el 80% de la mercadería que exporta la Argentina e ingresa el 95% de las importaciones. Sin embargo, desde que, en 1992, el gobierno de Carlos Menem, le quitó a la Administración General de Puertos la gobernanza sobre los puertos, canales y tareas de mantenimiento, descentralizando la administración, el Estado cedió al sector privado la gestión de la actividad portuaria, el mantenimiento de la ruta fluvial y perdió capacidad de control y regulación. El Paraná se consolidó en las últimas tres décadas como el circuito navegable más importante del país. Sin embargo, coexisten en él, el transporte de mercaderías lícitas con el contrabando de bienes lícitos como granos y petróleo, hasta el tráfico de estupefacientes y la trata de blancas. El fisco argentino pierde millones de dólares por la subfacturación de exportaciones y el contrabando, mientras los cargamentos de drogas salen de Sudamérica y terminan en Europa y Estados Unidos, sorteando los controles sin grandes dificultades. (...)".
Gacetilla de prensa Proyecto Económico + IADE

Bajo el rimbombante título de “Un debate estratégico para el desarrollo del Corredor del Litoral”, los “científicos” del Instituto Argentino para el Desarrollo Económico que conduce la diputada kirchnerista Fernanda Vallejos, desplegaron a lo largo de 22 páginas toda una colección de falacias, errores y conceptos que solo denotan dos cosas, ceguera ideológica y un brutal analfabetismo en materia náutica y naval.

El libelo, suma el “valioso aporte” de Mempo Giardinelli. Lamentablemente el talento del multipremiado escritor chaqueño se cimenta sobradamente en otras lides que por lo visto están muy lejos de la ciencia y el arte de navegar.

Entrando de lleno en el análisis del pseudo informe técnico destinado a presionar al presidente Alberto Fernández ante su –por ahora- irreversible decisión de mantener el actual esquema de dragado y balizamiento de la vía fluvial en manos privadas, los párrafos iniciales del escrito repasan la política de privatización portuaria que dispuso a partir de 1992 el gobierno de Carlos Menem.

Con una obvia y entendible crítica ideológica a la aparición del capital privado en el escenario portuario, nada se dice acerca de la construcción de una gran cantidad de puertos privados a los que la medida dio origen y al empleo de miles de argentinos en decenas de puertos que el Estado Nacional jamás hubiera construido. De la misma manera la iniciativa de profundización del Paraná a efectos de posibilitar el tránsito de buques de gran porte y la integración fluvial de 5 países es ostensiblemente denostada.

"(...) Un informe conjunto del centro de estudios Proyecto Económico y el IADE señala, de forma pormenorizada, las deficiencias y los perjuicios económicos que genera al país la desregulación del Río Paraná. Además, propone, en sintonía con la Unidad de Información Financiera (UIF), la creación de un órgano de control sobre prácticas ilícitas y de una base federal que centralice la información económica y financiera para realizar un monitoreo y control del comercio y del tráfico ilícito.
“Argentina tiene la oportunidad de recuperar y fortalecer el control y la administración del río Paraná que perdió a manos del menemismo”, sostiene el informe de Proyecto Económico, dirigido por la diputada Fernanda Vallejos, y el IADE, presidido por la Lic. Marisa Duarte. Durante una disertación que brindó la semana pasada, junto al senador Jorge Taiana, Vallejos ya había adelantado: “mi posición es que el control y la administración deben estar en manos del Estado”.
La definición estuvo en línea con las declaraciones que también formuló el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, para el que “el Estado debe tener el control completo y absoluto de sus vías navegables. Tiene que recobrar el manejo de la Hidrovía”. (...)".
Gacetilla de prensa Proyecto Económico + IADE

Caliente, caliente

Sin más preámbulo, Vallejos y su “DreamTeam” arremeten de lleno contra el histórico concesionario de las tareas de dragado y balizamiento del curso fluvial conocido como Hidrovia Paraná Paraguay, denunciando una condena que la empresa Jan de Nul habría recibido en Bélgica por pago de coimas.

Nada dice el informe sobre el hecho análogo que –según el titular de la empresa asociada a Jan de Nul, Emepa– determinó el pago de una contribución en dólares en el año 2010 para que el gobierno de Cristina Kirchner prorrogara la concesión hasta el presente. En aquel momento, al parecer, a nadie el importaba ni el impacto ambiental, ni la soberanía fluvial o la estatización del peaje. 

En los párrafos siguientes, la frase más repetida será “la mal llamada Hidrovía”.

Definitivamente el nombre no gusta. En parte porque recuerda al menemismo y en parte – tal como reconocen algunos de los mentores del proyecto- recuerda a Ricardo Jaime y sus enjuagues entre los que se cuenta la prórroga antes enunciada.  

Los nombres en danza van desde “Canal troncal” pasando por “Canal Soberanía” hasta el inefable “Canal de navegación Néstor Kirchner”.

Queda clarísimo de aquí en adelante que se llame como se llame a este importantísimo cauce fluvial, muchos expertos –empezando por la diputada Vallejos- deberían al menos consultar a alguno de los muchos organismos académicos en la materia. (Academia del Mar, Liga Naval Argentina, Servicio de Hidrografía Naval, Universidad de la Marina Mercante y otros).
De esa forma no arrancarían técnicamente tan mal como cuando dicen “Por allí navegan barcazas de gran calado los 365 días del año”.  

Grosero error que denota que quien lo escribe jamás vio una barcaza ni en foto. Las barcazas son por definición artefactos navales destinados a la navegación fluvial en aguas de poco calado. 

Pero ¿a quién le importa, no? 

Dejando atrás al primer yerro notable y emulando a otras tesinas del poder, lo que sigue es un más o menos acertado googleo de datos técnicos relacionados con el tipo de mercancías transportadas por la “mal llamada Hidrovia”.  Llama la atención como en el afán copiador se pegan conceptos como los vertidos por el líder de los capitanes fluviales (Julio Gonzalez Insfrán) quien sostiene que “a pesar de que el 50% de la Hidrovia se encuentra en territorio argentino, la bandera nacional solo transporta el 2% de la carga que por allí circula”. 

Si bien el concepto vertido por el reconocido líder sindical de los navegantes de río es absolutamente certero, lo que no dice el informe es que debido precisamente a las políticas implementadas a partir de 2004 y que atentan contra el negocio naviero, los principales armadores locales mudaron sus flotas a Paraguay, Bolivia y Brasil donde parecería estar mas claro el concepto de libre empresa.  Nada tiene que ver en esta situación, la empresa que draga y solo draga la vía fluvial.

Luego de otra serie de datos técnicos y económicos más o menos bien copiados de la web, los “expertos” convocados por Vallejos comienzan a desplegar técnicas de análisis dignas del arte culinario y terminan conformando una verdadera ensalada de confusión, desinformación y conclusiones erradas.

"(...) A lo largo de las 21 páginas, el informe detalla el funcionamiento de la operatoria de contrabando de granos en la Hidrovía, el manejo en manos de empresas privadas, el traslado de la carga en barcazas de bandera paraguaya, el control de los procedimientos de carga y descarga de los granos por parte de empresas transnacionales en puertos privados, la insuficiencia de los mecanismos de control y fiscalización aduanera, y la posibilidad de transbordar la mercadería en Montevideo. En el mismo sentido, advierte que “sin descuidar los necesarios estudios de impacto ambiental”, se debe considerar que el debate de fondo pasa por “cómo todo el sistema de transporte logístico, control y fiscalización de la actividad exportadora presenta serias vulnerabilidades que pueden afectar los intereses económicos nacionales”. Por ello, afirma que “la administración y el control deben ser ejercidos por el Estado”.
El estudio propone, entre otros puntos, implementar la administración y control estatal de la Hidrovía, la creación de un órgano de control sobre prácticas ilícitas y, también, de una base federal que centralice la información económica y financiera acerca de los puertos públicos y privados habilitados, embarcaciones en operaciones, zonas de producción, procesamiento a transporte, con el objetivo monitorear y controlar el tráfico comercial, así como al tráfico ilícito, “en línea con los objetivos del GAFI”. (...)".
Gacetilla de prensa Proyecto Económico + IADE

Un asunto estratégico

Asumiendo que los redactores del documento conocen en profundidad el término, el valor estratégico de la Hidrovia Paraná Paraguay es justificadamente exaltado.  

No pueden caber dudas al respecto, el corredor fluvial es de vital importancia estratégica, política y económica. Pero, una vez más, hay que repetirlo para que se entienda. Hablamos del dragado y balizamiento y solo de eso. Argentina, en la parte que le corresponde, debe tener todo el control que deba tener para asegurar el dominio soberano de la vía navegable, lo que no tiene nada que ver con asumir que no tiene los medios técnicos para efectuar el mantenimiento.

Uno de los ingenieros navales que más defiende la estatización del dragado, fue el responsable como funcionario público de terminar de destruir la menguada flota de dragas con las que contaba el país.  

Si la diputada Vallejos no lo sabe, sería bueno que ella consulte al Instituto Patria y que pregunte porqué algunos exfuncionarios no pueden ni acercarse a Balcarce 50.

Atacando de lleno la lógica decisión presidencial de prorrogar la vencida concesión en manos de Jan de Nul por 90 días (a los que seguirán tantas prórrogas como sean necesarias) Vallejos no se priva de cuestionar la reciente decisión de poner el proceso licitatorio en manos de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables y la consecuente disolución de la unidad ejecutora del llamado a licitación que Fernández había constituido a regañadientes.

Los reclamos de coparticipación provincial para la gestión de la licitación que enarbola el equipo de la legisladora kirchnerista parecen no haber tenido en cuenta el articulo 126 de la Constitución Nacional que taxativamente las excluye de las decisiones en materia de navegación interior o exterior, aunque si les concede el derecho a explotar sus recursos hídricos lo que no tiene nada que ver con el dragado.

Asimismo, y por enésima vez, emana desde lo más puro del ideario kirchnerista una profunda confusión entre la privatización del mantenimiento de una vía fluvial, con el control soberano del contrabando, las maniobras de subfacturación, el transporte de estupefacientes, la preservación del medioambiente y el resguardo del comercio exterior argentino. 

Mentiras o verdades a medias, confusión en las formas y en el fondo, ceguera ideológica o una simple y triste ignorancia en la materia enmarca este para nada útil informe realizado por “expertos” seguramente pagados con fondos públicos. 

Uno más de tantos emitidos y por emitirse. Con un seguramente único destinatario – el Presidente de la Nación- con la intención de marcar lo más lo posible la cancha a como de lugar. No tenemos dragas, no tenemos los medios para construirlas en tiempo, forma y a precios competitivos. El mundo draga con alguna de las 5 firmas internacionalmente reconocidas para hacerlo sin que por ello pierdan su soberanía, les roben el agua o la arena o cualquier otra fantasía que el ideario K supuestamente quiere proteger de las garras de vaya a saber que imperio. 

Tal vez no tengamos que confundirnos y pensar que son patriotas aunque ignorantes, tal vez parafraseando a Bill tengamos que concluir que solo “ Es la caja, estúpido.

FUENTE URGENTE 24